El desmantelamiento del campo de refugiados en el norte de Francia genera tensiones con Bélgica, que multiplica los controles fronterizos ante el temor de que los migrantes se desplacen a su territorio para intentar cruzar a Reino Unido
La Comisión propone una fuerza de 1.500 efectivos para salvaguardar la libre circulación de personas, en entredicho tras la reinstauración de controles fronterizos por la crisis migratoria