Señora primera ministra de Reino Unido: qué alegría cuando nos dijeron que habría de nuevo una mujer en Downing Street. Por fin otra fémina reemprendería la tarea de esa gran innovadora de la política, con faldas y a lo loco, que fue Margarita Thatcher. Así los tories culminarán el viaje al centro y se convertirán en el partido de los trabajadores. "Con los pobres de la tierra quiero yo mi suerte echar", decía José Martí y repite ahora Theresa May. Por eso, empieza poniendo límites a la contratación de extranjeros. Otra gran mujer, Marine Le Pen, se suma entre costuras. Qué bien.