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Literatura
El amor y el espanto
Las primas, reeditada ahora, es mucho más que un relato iniciático de una joven talentosa pero con un trastorno psíquico
Ana Llurba
- 04/12/2015
- Número 12
Yuna Riglos, la joven narradora de esta peculiar historia, es una artista plástica que, a pesar de su precoz talento y reconocimiento, tiene un leve trastorno psíquico que le impide, entre otras cosas, poder entender los relojes hasta los 18 años y le obliga a consultar el diccionario todo el rato. Su familia está formada por un padre ausente que abandonó el hogar cuando era pequeña, su resignada madre, maestra su hermana menor, quien adolece de retraso mental y malformaciones congénitas agudas, además de una inhóspita colección de tías y tíos. Las primas trata el comienzo de la juventud de Yuna y la intensa y ambivalente relación de candor y crueldad con su familia y el entorno cercano y, en especial, con su prima Petra, una avispada e intimidante enana prostituta que la iniciará en las sutiles entrelíneas del universo sexual de los adultos. Esta historia es mucho más que un relato de iniciación de la hija de una familia anormalmente normal.
El mayor mérito de esta fulgurante novela es una implacable voz narradora que administra un vigoroso tempo oral evitando el registro costumbrista. Se le suma una eficaz intensidad barroca, con el recurso a un vocabulario vigoréxico y asilvestrado que imita con un ritmo desbocado las dificultades de articulación o dislalia de la protagonista, postergando el uso de los puntos y las comas: “Lo misterioso y químicamente imposible para mi capacidad, conjunción de pequeñeces flotantes y vivas que danzaban en aguas increíbles y maternales y día a día concatenaban insertándose como un rompecabezas magnífico hasta configurar una criatura y el solo imaginar qué estaría configurando Betina me espeluznó porque nosotros nada bueno traíamos a esta superficie y hasta yo misma, a pesar de ser pintora Riglos no escapaba a la clasificación de ser extraña y espantosa no por fuera sí por dentro y recordé a Carina jurando que no le manipularían el bebé, porque eso era lo que llevaba Betina en la barriga”.
Yuna pasará por dos abortos, una violación, un asesinato y otra serie intermitente de violencias íntimas y truculencias “normalizadas” por la desasosegada sintaxis de Aurora Venturini. En la colección Mapa de lenguas, Literatura Random House ha reeditado esta novela junto a tres títulos más: Nosotros, los Caserta, El marido de mi madrastra y Los rieles.
El mayor mérito de esta fulgurante novela es una implacable voz narradora que administra un vigoroso tempo oral evitando el registro costumbrista. Se le suma una eficaz intensidad barroca, con el recurso a un vocabulario vigoréxico y asilvestrado que imita con un ritmo desbocado las dificultades de articulación o dislalia de la protagonista, postergando el uso de los puntos y las comas: “Lo misterioso y químicamente imposible para mi capacidad, conjunción de pequeñeces flotantes y vivas que danzaban en aguas increíbles y maternales y día a día concatenaban insertándose como un rompecabezas magnífico hasta configurar una criatura y el solo imaginar qué estaría configurando Betina me espeluznó porque nosotros nada bueno traíamos a esta superficie y hasta yo misma, a pesar de ser pintora Riglos no escapaba a la clasificación de ser extraña y espantosa no por fuera sí por dentro y recordé a Carina jurando que no le manipularían el bebé, porque eso era lo que llevaba Betina en la barriga”.
Yuna pasará por dos abortos, una violación, un asesinato y otra serie intermitente de violencias íntimas y truculencias “normalizadas” por la desasosegada sintaxis de Aurora Venturini. En la colección Mapa de lenguas, Literatura Random House ha reeditado esta novela junto a tres títulos más: Nosotros, los Caserta, El marido de mi madrastra y Los rieles.
Las primas
Aurora Venturini
Literatura Random House,
Barcelona, 2015,
194 págs.
Aurora Venturini
Literatura Random House,
Barcelona, 2015,
194 págs.